Primeros auxilios: ¿qué hacer ante una fractura?
Al momento de rescatar a una persona,
muchos por alguna caída o accidente, pueden presentar fracturas
que deben ser tratadas entre los primeros
auxilios antes de ser trasladada a un centro de salud para su atención
más apropiada.
Es importante
mencionar que una fractura o traumatismo es un hueso quebrado y que requiere de
atención médica para su recuperación y tratamiento. Cabe destacar que la fractura
se puede deber a un traumatismo o una lesión grave, según el
desarrollo del accidente que haya tenido la persona.
¿Cuándo hay una fractura?
Para
Néstor Chayelle, los
primeros signos
que se deben tomar en consideración para saber si la persona posee una fractura
de alguna extremidad son las siguientes:
- Articulación o
extremidad notablemente deformada o fuera de su lugar.
- Inflamación,
hematomas o sangrado.
- Dolor intenso.
- Sensación de
entumecimiento y hormigueo.
- Limitación del
movimiento o incapacidad para mover la extremidad afectada.
- Ruptura de la
piel y visibilidad del hueso que ha sobresalido, en caso que la fractura
sea expuesta.
Consejos para atender una fractura
Algo que todo bombero y paramédico debe
saber es atender este tipo de emergencias y brindar los primeros
auxilios correspondientes, tomando en consideración los siguientes consejos:
- Si la persona no
responde, ni respira o no se mueve, el bombero o rescatista debe
empezar a realizar RCP
(siempre y cuando la persona no respira o el corazón no le late).
- Aplicar
presión con suavidad y no
realizar movimientos bruscos que puedan causarle dolor al paciente o
producir un sangrado intenso.
- Verificar la
extremidad o articulación que se encuentre fracturada o deformada,
además de observar si el hueso perforó la piel.
- Si la extremidad
del brazo o la pierna se encuentran lesionados (como un dedo de la mano o del
pie) deben observar si la misma presenta un color azulado.
- Si se tiene sospechas de que la persona puede tener un hueso del cuello, cabeza o espalda fracturados, es mejor no mover al paciente para no ocasionar daños mayores, hasta que llegue la ayuda correcta.
Es vital que al
momento de realizar todo este procedimiento, y si se encuentran en una situación
de rescate, se debe inmovilizar la zona lesionada, pero no se debe
intentar volver a alinear el hueso ni empujar hacia adentro del hueso que se
haya salido.
Por esta razón, el bombero o rescatista debe recibir una capacitación que le permita saber cómo entablillar un hueso si no se encuentra la ayuda profesional posible. En estos casos se puede colocar una férula en la zona superior e inferior de la fractura o utilizar un material acolchado en las férulas puede ayudar a reducir las molestias.
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