Néstor Chayelle: Rescate de personas en emergencias de incendios

Emergencias en escenarios hostiles son el día a día de los cuerpos bomberiles y de rescate, quienes tienen como labor el de socorrer víctimas de siniestros, fuegos y desastres naturales o provocados por la mano del hombre, para evitar la pérdida de vidas humanas y valores materiales. Entre estas situaciones límites, los incendios constituyen una de las más peligrosas y potencialmente dañinas de todas, puesto que el nivel de destrucción que pueden provocar las llamas es muy alto.

Los incendios pueden debilitar las estructuras en las cuales aún existan personas atrapadas aumentando los niveles de riesgo. Por esto y ante la posibilidad de convertirse en otra víctima, el rescatista debe poner toda su atención y conocimientos al servicio de su trabajo, disminuyendo en lo posible el ponerse en situaciones comprometidas que puedan afectar negativamente tanto su persona como la del rescatado.

Equipos y técnicas básicas y avanzadas para este tipo de maniobras son parte del entrenamiento de estos cuerpos de seguridad, los cuales se educan para reconocer los distintos elementos indicativos de su entorno, como: debilitamiento de las estructuras, fenómenos termodinámicos, las distintas fases del incendio y los riesgos externos que pueden presentarse en forma de electricidad, productos químicos, entre otros.

El salvamento de personas se realiza una vez que las condiciones del entorno han sido revisadas y la seguridad del propio rescatista está confirmada, desde ese momento se ponen en marcha una serie de decisiones muy importantes para el desarrollo de la actividad, la logística de la extracción, el correcto funcionamiento de los equipos y la labor grupal, entre otros puntos a tomar en cuenta para un resultado positivo.